Revista Mexicana de Ciencias Agrícolas   volumen 11   número 5   30 de junio - 13 de agosto, 2020

DOI: https://doi.org/10.29312/remexca.v11i5.2117

Artículo

Sustentabilidad socioeconómica y ambiental de los sistemas
de producción de maíz de temporal

Nelda Guadalupe Uzcanga-Pérez

Cristina Isabel Chanatásig-Vaca2

Alejandro Cano-González 3

1Campo Experimental Mocochá-INIFAP. Antigua Carretera Mérida-Motul km 25, Mocochá, Yucatán. CP 97454. 2Universidad Internacional Iberoamericana. Calle 15 entre 10 y 12, Colonia IMI III, Campeche, México. CP. 24560. (cchanatasig.yahoo.com.mx). 3CIRSE-INIFAP. Calle 6 No. 398 x 13, Av. Correa Rachó, Col. Díaz Ordaz, Mérida, Yucatán, México. CP. 97130. (cano.alejandro@inifap.gob.mx).

§Autora para correspondencia: uzcanga.nelda@inifap.gob.mx.

Resumen

El trabajo se realizó en el estado de Campeche a través de encuestas con productores de maíz de temporal para describir las características tecnológicas y de manejo, socioeconómicas y culturales de los sistemas de producción. Se utilizaron dos técnicas de análisis multivariado para la reducción y clasificación de la información. Para el análisis ambiental se generó un índice de aptitud agrícola sustentable con información de las características físico-químicas del suelo. Los resultados indicaron que 65.5% de los productores que se entrevistaron utilizaron el sistema convencional para la producción de maíz de temporal y aunque se ubicaron en zonas de vocación agrícola, se identificaron diferencias en tecnificación y socioeconómicas. El otro 34.5% de productores utilizan labranza mínima y se ubicaron en zonas de vocación pecuaria. A pesar que el índice de aptitud agrícola sustentable ubicó 71% de los productores dentro de la categoría moderada, es necesario implementar estrategias para minimizar la extracción de los nutrientes en el suelo ya que los productores retribuyen muy poco al aplicar dosis por debajo de lo recomendado. En el indicador de mineralización potencial anaerobia del nitrógeno asociado con la fertilidad del suelo se obtuvo valores negativos en los dos grupos de suelo predominantes Leptosoles con -14.7 y Vertisoles con -27.9.

Palabras clave: categorización, indicadores, sistemas de producción.

Recibido: abril de 2020

Aceptado: julio de 2020

Introducción

Desde el punto de vista alimentario, político, económico y social, la producción de maíz es una de las actividades agrícolas más importantes de México (González y Alferes, 2009; Fernández et al., 2013). Es por ello, que es altamente demandado, pues se estima un consumo anual de 41.9 millones de toneladas, de las cuales 57.6% corresponden a maíz blanco y cuya producción es autosuficiente y 42.4% corresponden a maíz amarillo, pero con una balanza comercial deficitaria teniendo que importar 80.2% del consumo nacional (FIRA, 2016).

Hoy en día no basta con satisfacer el consumo y garantizar la seguridad alimentaria del país, que es uno de los principales retos del sector agroalimentario (SAGARPA, 2013), la producción de maíz debe ser no solo productiva y rentable sino también justa y sustentable. En este sentido se han realizado varios estudios para caracterizar y posteriormente evaluar los diferentes sistemas de manejo de recursos para la producción. Sólo en México existen aproximadamente 34 estudios que describen 25 casos de estudio de diferentes sistemas: agroforestal, agrosilvopastoril, cultivos comerciales y básicos, pastizales, forestal y acuacultura (Astier et al., 2012).

Entre éstos destacan los sistemas campesinos para la producción de maíz y leche (Brunett et al., 2005), los que comparan la sustentabilidad de diferentes tipos de milpa, tradicional y con maíz en monocultivo (Sánchez y Romero, 2018) e incluso las comparaciones con respecto al sistema de maíz campesino y el sistema diversificado de cultivos (Astier et al., 2003), sobre el manejo tradicional y en transición al sistema agroindustrial (Sánchez-Morales et al., 2014).

Por consiguiente, el objetivo de este trabajo fue realizar una caracterización socioeconómica y ambiental de los sistemas de producción de maíz de temporal en el estado de Campeche, para generar información pertinente para proponer mejoras hacia una producción sostenible de maíz en el estado.

Materiales y métodos

El estudio se realizó en diez de los once municipios del estado de Campeche, con excepción de Palizada durante el ciclo primavera verano 2014. Se obtuvo información del manejo del cultivo de maíz de temporal a través de entrevista directa con el productor con un guion de cuestionario estructurado sobre diferentes tópicos como: 1) tecnológicas y de manejo (preparación del terreno, tipo de maquinaria utilizada, condición del suelo de la parcela, fechas de siembra, tipo de semilla, tecnología empleada, dosis de fertilización (kg ha-1). Actividades de control de plagas y enfermedades, lugar de venta, apoyos para la producción); y 2) socioeconómicas (superficie sembrada (ha), objetivo de la producción, tenencia de la parcela, apoyos gubernamentales y rendimientos (t ha-1). Se calculó el tamaño de muestra para una población de 20 000 productores con la ecuación de muestreo simple aleatorio para la estimación de proporciones con la condición de varianza máxima, confianza de 95% y precisión de 5% (Taro, 1967).

Las variables del cuestionario fueron tabuladas como nominales dicotómicas y ordinales. Se realizó un análisis factorial para resumir la información y poder describirla más fácilmente. El método de factorización que se utilizó fue componentes principales, mismo que se calculó desde la matriz de correlaciones y se utilizó el método Varimax para la rotación de la solución de los componentes (Landero y González, 2011).

La solución de cada uno de los factores se guardó como nuevas variables en la base de datos original que se utilizó posteriormente para el análisis de agrupamiento de tipo no jerárquico con la técnica de K-promedios o k-means (de la Garza et al., 2013). Una vez realizada la clasificación se generó una nueva variable con esta información y se realizó el análisis de varianza tomando como factor, el grupo de pertenencia de cada productor.

Por otra parte, las variables ambientales se obtuvieron a partir de la información de las unidades de respuesta homogénea (URH) generada por Cano-González et al. (2015) para la zonificación productiva sustentable del cultivo de maíz en la Península de Yucatán. Debido a que éstas URH se formaron a partir de las interacciones de tipos de suelo (IUSS, 2007), relieve (grado de pendiente del terreno) y tipo de vegetación o uso del suelo (serie 3 INEGI) se extrajeron los datos de las variables físico químicas (materia orgánica (MO)= %, capacidad de intercambio catiónico (CIC)= % arcilla (ARC)= % y espesor de la primera capa de suelo = E (cm)) de cada URH asociada a la parcela del productor.

Con estas variables se calcularon las funciones de pedotransferencia (FPT) propuestas por Aguilar et al. (2011); Aguilar y Bautista (2011), que sirvieron como indicadores ambientales de fertilidad de suelo de uso agrícola para identificar posibles restricciones o la degradación por uso y manejo del suelo. A partir de las FPT y considerando también la primera capa de suelo (E), se generó un índice de aptitud agrícola sustentable (IAAS) para cada subgrupo de suelo siguiendo la función propuesta por Aguilar y Bautista (2011): IAAS= (RMOD*0.25) + (DC*0.25) + (MPAN*0.25) + (E*0.25).

Donde: RMOD= retención de materia orgánica disuelta (%); MPAN= mineralización potencial anaerobia del nitrógeno (mg kg-1 suelo); DC= descomposición de carbono (mg kg-1 suelo); E= espesor de la primera capa de suelo (cm). Posteriormente, los valores de cada uno de los componentes del IAAS se transformaron a porcentajes asignando ponderaciones iguales (0.25) por variable, para generar categorías (apto, moderado y marginal) de las URH según su aptitud para uso agrícola sustentable, considerando que los suelos más aptos son los de menor vulnerabilidad potencial (Aguilar et al., 2013).

La caracterización de los sistemas de producción de maíz de temporal se realizó con base en los principales determinantes propuestos por Mansera et al. (1999) con la descripción de varios componentes como: tecnológicos y de manejo, socioeconómicos y culturales y biofísicos. Los estadísticos descriptivos y los análisis multivariados se ejecutaron con la herramienta Statistical Package for the Social Sciences (SPSS) versión 21.

Resultados y discusión

Se encontró que las variables relacionadas con la condición del suelo de la parcela y con la manera de realizar las actividades culturales como desvare, barbecho o arado, rastra semipesada y agrícola, fumigación con tractor y cosechadora fueron adecuadas para el análisis factorial. Del análisis se extrajeron ocho componentes, pero siguiendo con los criterios de Káiser, solo se seleccionaron los componentes que tuvieron más información en los factores de la variable con autovalores > 1 (Landero y González, 2011; de la Garza et al., 2013).

El primer componente tuvo un autovalor de 3.25, el segundo componente con un autovalor de 1.23 y el tercer componente un autovalor de 1.11. En su conjunto estos tres componentes cumplieron con el criterio del porcentaje de variación explicada acumulada, rango de entre 60 y 95%, pues el porcentaje de variación explicada de los tres componentes fue de 69.84%. Se conformaron tres grupos de productores. El primero con 217 productores (34.5%), el segundo con 327 productores (52.2%) y el tercer grupo con 83 productores (13.3%).

Características tecnológicas y de manejo

El primer grupo pertenece a un tipo de producción de labranza mínima (Rojas, 2001) pues solo el 28.1% utilizó rastra agrícola para la preparación del terreno. Las siembras las realizaron en el mes de junio con semilla criolla preferentemente y con rendimientos que oscilaron entre 2 y 3.7 t ha-1. Las labores se realizaron manualmente, incluyendo la siembra, de ahí que la mayoría de este grupo de productores no rebasaron extensiones de superficie cultivada de 3 ha (Cuadro 1).

Cuadro 1. Características tecnológicas y de manejo de los sistemas de producción de maíz de temporal en Campeche.

Determinantes

Grupo de productores de la muestra

1

2

3

Fecha de siembra

11-20 de junio

01-10 de julio

11-20 julio

Tipo de semilla

57.6% criolla,

18.9% híbrido,

12% variedad y

11.5% reciclada

69.4% híbrido,

12.2% criollo,

9.5% variedad y

8.9% reciclada

81% híbrido,

8.3% variedad,

6% criolla y

4.7% reciclada

Siembra

manual/espeque

62.9% sembradora

37.1% manual/espeque

79.8% sembradora 20.2% manual/espeque

Fertilización

43.8% no fertilizaron,

30.4% a los 30 días de la siembra,

19.8% a los 15 de la siembra y

6% junto con la siembra

64.2% junto con la siembra, 14.4% a los 15 días de la siembra,

12.8% a los 30 días de la siembra y

8.5% no fertilizó

83.3% junto con la siembra,

11.9% a los 15 días de la siembra,

1.2% a los 30 días de la siembra y

3.6% no fertilizó

Pentafosfáto

(kg ha-1)

26.4

62.8

77.6

Nitrógeno

(kg ha-1)

13.4

26.6

32

Cosecha

manual

54.7% maquinaria y

45.3% manual

75% maquinaria y 25% manual

En un estudio realizado en Chiapas con respecto a las actitudes y percepciones de los productores de maíz de temporal hacia semillas mejoradas, Sánchez-Toledano et al. (2017) tipificaron a los agricultores como conservadores al mostrar resistencia al uso de semillas mejoradas y mayor

interés por objetivos de tipo socioculturales como maximizar los beneficios familiares, impedir el despoblamiento de las comunidades rurales y mantener la fertilidad del suelo (Sánchez-Toledano et al., 2017).

Los productores del primer grupo se concentraron geográficamente en la zona sur del estado: 20.3% Candelaria, 20.3% Carmen, 18% Calakmul, 15.2% Escárcega y 26.2% en la zona norte del estado (Figura 1).

Figura 1. Distribución geográfica del primer grupo de productores de maíz de temporal.

Estas zonas, norte y sur del estado, se caracterizan por una aptitud moderada y marginal para la agricultura con desarrollo de cultivos principalmente de temporal, entre los que destaca, maíz y chile, orientados al autoconsumo y el excedente al mercado local (Uzcanga et al., 2010). Por otra parte, tanto el segundo como el tercer grupo de productores campechanos utilizan labranza convencional (Rojas, 2001), pues se identificó que utilizan arado, pases de rastra y cultivadoras para mover el suelo.

El segundo grupo se ubicó principalmente en cuatro municipios, 21.7% Hopelchén, 13.5% Champotón, 13.8% Tenabo y 10.1% Campeche, que corresponde a la zona norte-centro del Estado. Estos productores sembraron durante los primeros días del mes de julio y aunque prevaleció la preferencia por semillas hibridas, 30.6% de los productores sembraron otro tipo de semillas de las que despuntan las de origen criollo.

El porcentaje de productores que utiliza maquinaria para la siembra es muy similar al que utiliza semillas híbridas y del mismo modo para los que siembran de manera manual y utilizan otros materiales. Pat et al. (2013) a este tipo de productores se les conoce como regionales y por lo general maquilan y no realizan todas las actividades del paquete tecnológico (Figura 2).

Figura 2. Distribución geográfica del segundo y tercer grupo de productores de maíz de temporal.

El tercer grupo de productores realizó actividades de desvare y barbecho que el segundo no hizo, lo cual coincide con Tucuch et al. (2007) como una labor arraigada entre los productores de maíz de temporal en zonas de alto potencial. También se identificó que la fecha más frecuente de siembra fue durante el período del 11 a 20 de julio, fecha que se ubicó dentro del período óptimo (15 de junio al 15 de julio), para este tipo de labranza de acuerdo con (Medina y Rosado, 2015), con alta preferencia por híbridos y uso de maquinaria para realizar las labores del cultivo (Cuadro 1).

La mayoría de estos productores se aglutinó en dos municipios, 41.7% Hechelchakán y 35.7% Campeche. Particularmente, en el municipio de Hecelchakán como indica Pat et al. (2013), se ubica una de las regiones menonitas más importantes del estado que en su mayoría son dueños de la maquinaria agrícola y utilizan un paquete tecnológico de temporal mejorado fertilizado mecanizado (TM/FM).

Características socioeconómicas

Con respecto a las características socioeconómicas se observó la prevalencia por la tenencia ejidal de las parcelas. La superficie varió según el grupo de productores, por ejemplo: el primer grupo que destina principalmente su producción para subsistencia, la superficie varió de 0.5 a 3 ha.

La mayoría de los productores del grupo dos y tres, destinan su producción para la venta, cuentan con mayores extensiones de superficie sembrada, rendimientos y de acuerdo con Sánchez-Toledano et al. (2017) pueden clasificarse como productores en transición cuyo principal objetivo es de interés económico como incrementar las ventas, generar empleo en la zona y mantener la fertilidad del suelo (Cuadro 2).

Cuadro 2. Características socioeconómicas de los sistemas de producción de maíz de temporal en Campeche.

Determinantes

Grupo de productores de la muestra

1

2

3

Superficie sembrada/productores

0.5-3 ha (51.4%),

3.1-5 ha (17.1%),

5.1-1 ha (15.7%),

10.1-2 ha (7.4%),

>20 ha (8.4%)

0.5-3 ha (55.9%),

3.1-5 ha (17.7%),

5.1-10 ha (14.4%),

10.1-20 (5.8%),

>20 ha (6.2%)

0.5-3 ha (54.2%),

3.1-5 ha (16.7%),

5.1-10 ha (16.7%),

10.1-20 (7.2%),

>20 ha (4.8%)

Objetivo de la producción

67.3% subsistencia y 32.7% ingresos

81.3% ingresos y 18.7% subsistencia

91.7% ingresos y 8.3% subsistencia

Tenencia de la parcela

64.5% ejidal,

17.5% rentada,

16.6% privada

72.5% ejidal,

22.3% privada,

5.2% rentada

78.6% ejidal,

21.4% privada

Apoyos gubernamentales

Si= 66.3%

No= 36.4%

Si= 81.3%

No= 18.7%

Si= 85.7%

No= 14.3%

Rendimientos/productores

0.33-2 t ha-1 (13.4%),

2-3.7 t ha-1 (37.5%),

3.8-5.4 t ha-1 (32.4%),

5.5-7.2 t ha-1 (14.8%),

7.2-8.9 t ha-1 (1.9%)

0.33-2 t ha-1 (15.6%),

2-3.7 t ha-1 (40.1%),

3.8-5.4 t ha-1 (30.3%),

5.5-7.2 t ha-1 (11.6%),

7.2-8.9 t ha-1 (2.4%)

0.33-2 t ha-1 (15.7%),

2-3.7 t ha-1 (36.1%),

3.8-5.4 t ha-1 (34.9%),

5.5-7.2 t ha-1 (10.8%),

7.2-8.9 t ha-1 (2.4%)

Las características de manejo del cultivo de los diferentes grupos identificados, se debe principalmente a la mecanización de la tierra, que de acuerdo con Pat et al. (2008), ocasionó la diferenciación entre los productores tradicionales, que adoptaron un modo de vida mixto que combino la agricultura de roza-tumba-quema con el trabajo asalariado y los productores que se dedicaron a la agricultura mecanizada con apoyos gubernamentales, ubicados al oriente del estado de Campeche.

En este estudio se observó una alta dependencia a los apoyos gubernamentales orientados a la productividad agrícola y al intermediarismo. Menos de 10% de los productores del segundo y tercer grupo mantienen esquemas de comercialización con contrato. La diferencia entre el segundo y tercer grupo es que los productores ubicados en campos menonitas del municipio de Hecelchakán son rentables con o sin subsidio mientras que los productores regionales son rentables únicamente con subsidio (Pat et al., 2013).

Características ambientales

El grupo de suelo predominante entre los productores muestreados fueron los Leptosoles con 32.1% que se caracterizan por tener un potencial agrícola limitado por su poca profundidad y alta pedregosidad a pesar de su rica capa de materia orgánica (RMOD= 81.4%). El 20.1% fueron Vertisoles que se identifican por su alto contenido de arcillas (57%) y son considerados según IUSS (2007), suelos fértiles, aunque con difícil manejo durante el estiaje.

En menor frecuencia se ubicaron los Nitosoles con 13.9%, Phaezem con 13.4% y Luvisoles, 12.1% de mayor uso agrícola y de acuerdo con IUSS (2007), presentan buenas condiciones de fertilidad (Cuadro 3).

Cuadro 3. Características físicas y químicas del grupo de suelo predominante de la muestra de productores.

Grupo de suelo (%)

Arcilla (%)

MO (%)

CIC (%)

Espesor (cm)

RMOD (%)

EC

(mg kg-1)

MPAN

(mg kg-1)

Cambisol (0.5)

16

4.7

16.8

16

58.9

671.4

-11

Gleysol (4.5)

35

3.8

20.6

20.9

57.6

618

-1.5

Leptosol (32.1)

36.3

10.7

38.2

16.4

81.4

835.9

-14.7

Lixisol (1.4)

51.6

4.2

20.6

25.7

42.7

581.6

18.5

Luvisol (12.1)

31.8

3.5

22.9

15.1

67.7

632.2

-11.2

Nitisol (13.9)

67.4

4

28.7

19.3

53.1

572.5

17.9

Phaeozem (13.4)

39.3

6.7

40.5

29.8

99.6

756.5

-30.4

Regosol (1.9)

16.6

3.8

14.2

16.4

54.3

639.8

-7.7

Vertisol (20.1)

57

3.9

43.9

21.9

104.9

667.9

-27.9

MO= materia orgánica; CIC= capacidad de intercambio catiónico; RMOD= retención de materia orgánica disuelta; EC= evolución de carbono; MPAN= mineralización potencial anaerobia del nitrógeno.

En la Figura 3 se observa la distribución espacial de las URH y los rangos de IAAS de cada categoría. Si bien las URH representan el área de influencia del productor no significa que se esté trabajando con agricultura en su totalidad, porque la frontera agrícola del Estado es de aproximadamente 98 720 ha (Cano y Uzcanga, 2014). La superficie de las URH representó para este estudio microrregiones con la misma subunidad de suelo, pendiente de hidrografía y por lo tanto, las condiciones de aptitud se aplicaron a las URH (Figura 3).

Figura 3. Distribución espacial de las URH por aptitud del IAAS en Campeche.

En 10 de los 11 municipios del estado de Campeche predominó un IAAS de tipo ‘moderado’ impactando en una superficie potencial de 535 641.3 ha. Siendo Hopelchén el que concentró la mayor superficie (39 527.9 ha). Por el contrario, los municipios de Carmen y Candelaria concentraron la mayor superficie con IAAS de tipo ‘marginal’ y por orden de importancia Campeche, Calakmul y Hopelchén concentraron mayor superficie con IAAS de tipo ‘apto’ (Cuadro 4).

Cuadro 4. Superficie en hectáreas de las URH por categoría del índice de aptitud agrícola sustentable.

Municipio

Índice de aptitud agrícola sustentable (IAAS) (ha)

Apto

Moderado

Marginal

Calakmul

21 089

54 502.5

8 049.7

Calkiní

3 016.1

53 337

Campeche

21 325.1

37 868.2

3 742.4

Candelaria

87 194.4

13 974

Carmen

14 761

58 425.3

16 290.3

Champotón

10 468.8

47 358.9

1 663.8

Escárcega

3 867.6

64 227.8

7 298.8

Hecelchakán

4 820.6

39 967.9

Hopelchén

17 277.3

76 328.5

5 377.8

Tenabo

10 091.5

16 430.8

Total

106 717

535 641.3

56 396.8

Por otra parte, se encontró que 70.9% de las parcelas de los productores se ubicaron dentro de una aptitud moderada para la agricultura sustentable y de éstos 52.2% cultivan maíz de manera convencional. Otro 22.4% de las parcelas presentaron condiciones aptas y de los cuales 34.35% utilizan labranza mínima. Finalmente, un mínimo de parcelas 6.7% se ubicaron en condiciones marginales donde 13.4% de los productores utilizan el sistema convencional de producción, aunque con mayor conocimiento técnico (Cuadro 5).

Cuadro 5. Clasificación de los productores y categoría del índice de aptitud agrícola sustentable.

Grupo

Apto

Moderado

Marginal

Total

muestra

(%)

muestra

(%)

muestra

(%)

muestra

(%)

I

52

24.2

143

66.5

20

9.3

215

34.4

II

73

22.3

233

71.3

21

6.4

327

52.2

III

15

17.9

68

81

1

1.2

84

13.4

Total

140

22.4

444

71

42

6.7

626

100

A pesar que en los tres grupos de productores predominó un IAAS de tipo moderado (66.5%, 71.3%, 81%) respectivamente, los productores del primer grupo están distribuidos geográficamente de acuerdo con Uzcanga et al. (2010) en municipios con vocación pecuaria. Mientras que los productores del segundo y tercer grupo se ubicaron en municipios de vocación agrícola, destacando el tercer grupo por tener una mayor participación en la producción de maíz al estado (SIAP, 2017) (Figura 4).

Figura 4. Distribución geográfica de índice de aptitud agrícola sustentable por grupo de productores.

Conclusiones

Se identificaron tres grupos de productores de maíz de temporal en el estado de Campeche y el de mayor representatividad fueron aquellos que se ubican en la zona norte centro del estado, cuya producción caracteriza por uso de fertilizantes, semillas hibridas con alternancia de maquinaria agrícola en labores como siembra y cosecha, su producción se destina principalmente a la comercialización de grano a través del intermediarismo.

En cuanto a la sustentabilidad de la producción de maíz la mayoría de las unidades de producción se encuentran en condición moderada, lo que significa que los productores deberán apropiar prácticas agrícolas que permitan la conservación de la materia orgánica y la aportación de abonos nitrogenados suficientes para compensar la extracción del nitrógeno por el cultivo. De no adoptar éstas prácticas, se corre el riesgo de que a mediano plazo esta condición cambie a marginal.

Agradecimientos

Los autores agradecen a la Secretaría de Desarrollo Rural del Gobierno de Campeche por el financiamiento del proyecto ‘Estimación de maíz en el estado de Campeche ciclo P-V 2014’ y The Nature Conservancy por el financiamiento del proyecto ‘Definición de metodología para el mapa de zonificación productiva sustentable’ de donde se derivó la siguiente publicación.

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